Un “trade-off” es una situación que implica la pérdida de algo y la ganancia también de alguna cosa. Digamos que equivale a nuestra “solución de compromiso”.
Puede deberse a limitaciones físicas o a decisiones meditadas y tomadas de forma consciente. En el caso de una hamburguesa existe una relación inversa entre conseguir un efecto “Maillard” de forma fácil e intensa y que siga manteniendo un interior sabroso, jugoso y tierno.
Pero como nos lo habéis pedido hemos dedicado casi todo este principio de 2025 a experimentar en nuestro obrador con nuevos cortes, combinaciones de magros y grasas de diferentes partes del animal para lograr una hamburguesa que no sabe de “trade-offs” o como nos gusta llamarla “sin compromisos”.
Desde su exterior dorado y crujiente gracias a la reacción de Maillard hasta su interior jugoso y lleno de sabor, esta hamburguesa es sinónimo de perfección.
La reacción de Maillard es un proceso químico que ocurre al cocinar carne a altas temperaturas, creando un sabor único y una textura irresistible.
Es mucho más que un fenómeno químico: es el alma del sabor. Esta reacción transforma los aminoácidos y azúcares naturales de la carne en una costra dorada llena de matices que encantan al paladar.
El Maillard no solo aporta textura, sino también profundidad y complejidad al sabor, convirtiendo cada mordisco en una experiencia inolvidable.
Nuestras hamburguesas SMASH BURGER ONE fue el fruto de mucho trabajo para lograr que este se produjese sin esfuerzo y en casi todas las condiciones posibles. Es una hamburguesa capaz de elaborarse siempre igual, de forma consistente, con un caramelizado perfecto y un sabor cárnico excepcional.
Una Smash Burger prioriza esa textura crujiente, incluso la apariencia visual de la misma, un exterior tostado que pide a gritos ser mordido es parte de su éxito y de su identidad.
Pero el mercado y los consumidores han evolucionado y hay cada vez más gente que apuesta por un punto intermedio.
Un exterior crujiente que contrasta perfectamente con un interior tierno y jugoso. Este equilibrio es lo que diferencia a la Fat Smash Burger.
Como en el caso de nuestra SMASH BURGER ONE y el resto de hamburguesas de nuestra gama todo comienza con carne cuidadosamente seleccionada, ganado criado y alimentado en condiciones óptimas. Nuestra carne procede de granjas familiares de proximidad que se encuentran en un radio de unos 150 kilómetros de nuestras instalaciones
Esto garantiza un sabor profundo y una textura que hace justicia al concepto de hamburguesa premium.
La Fat Smash Burger se cocina siguiendo una técnica de "smash", donde la carne se aplasta directamente sobre una plancha caliente. Este método no solo maximiza la superficie de caramelización, sino que también sella los jugos, logrando un equilibrio perfecto entre crujiente y tierno.
Para lograr un interior jugoso, la clave está en no manipular demasiado la carne, nuestro proceso exclusivo de picado y amasado esta pensado para lograr el mejor resultado en la plancha.
En el caso de la Fat Smash Burger, la técnica "smash" se aplica solo una vez, sellando los jugos de forma eficiente. La temperatura de la plancha y el atemperado de la carne, así como la técnica de realizar el “smash” son muy parecidos a los de la SMASH BURGER ONE
Significa no sacrificar ningún aspecto del producto. Desde el sabor hasta la textura y la presentación, la Fat Smash Burger representa un equilibrio perfecto entre todos estos elementos.
Butcher&Chef lleva la jugosidad a otro nivel gracias a su experiencia en seleccionar cortes con la proporción ideal de grasa, asegurando un sabor tierno y lleno de matices.